Por Máximo Brizuela, Secretario General:
“Hay jóvenes viejos y viejos jóvenes, y en estos últimos me ubico yo”, supo expresar Salvador Allende en la Universidad de Guadalajara el 2 de diciembre de 1972.
El discurso, que aún se puede escuchar en diversas plataformas, representa un análisis y radiografía de la Latinoamérica de aquellos años. Lamentablemente, no dista de la que vivimos actualmente; donde las desigualdades e injusticias aún están presentes en nuestra tierra.
La búsqueda de igualdad, de oportunidades para todos, la lucha por obtener y resguardar derechos, requiere de un compromiso permanente, de un verdadero sentir de las causas por las que se da pelea y por sobre todo tener verdadera conciencia social del lugar al que pertenecemos.
Aquella frase de Salvador Allende intentaba evocar el ímpetu de los espíritus jóvenes, para que se alcen y den testimonio en contraposición de aquellos que descansan en el conformismo del status quo; entendiendo como joven, a aquella persona con ganas de cambio en busca de un mundo más justo para todos y todas.
Ese llamado podría bien estar relacionado a la realidad del movimiento obrero en general y a nuestro sindicato en particular. Es por eso que insistimos en la participación de aquellas personas que pertenecen al mismo, con un ferviente llamado a la militancia, para abrazar los símbolos y su historia, que tenemos la misión de seguir construyendo.
No basta con pertenecer o decir ser, sino que es necesario estar y llevar adelante acciones permanentes, para el colectivo de miembros de esta hermosa familia que es Luz y Fuerza. Es por ello que tenemos que resaltar el valor inagotable de los espíritus jóvenes, que son los que varadamente hacen la historia y resguardan la conciencia de la clase trabajadora.
Los jóvenes viejos no han hecho la historia, más bien son a los que les ha pasado en frente, para luego lamentar las consecuencias de su propia inacción.
Para construir un mundo y la sociedad que queremos, necesitamos compromiso y aquí hay una organización gremial que abraza a todos sus miembros y tiene abierta sus puertas para receptar opiniones e ideas que buscan la verdadera justicia social y la defensa de los Convenios Colectivos de Trabajo que tanto nos costó obtener.
